Gelatina de limón, un dulce ligero y refrescante

La frescura del limón hace que sea un ingrediente imprescindible en granizados, sorbetes o helados.

Si te apetece probar un dulce ligero pero con mucho sabor, te animamos a preparar esta gelatina de limón y nata.

Para realzar el sabor cítrico de la gelatina de limón y nata, te recomendamos acompañarla de ralladura confitada de limón. Además, esta ralladura, puedes conservarla varios meses en el frigorífico y servirla con tus natillas y cremas, o con tus yogures.

En la elaboración de gelatina de limón para 4 ó 6 personas, necesitas:

• 400 ml de nata líquida
• 150 gr de azúcar glacé
• 80 gr de zumo de limón (2 o 3 limones)
• 5 láminas de gelatina

Para la ralladura confitada de limón

• La ralladura de dos limones
• 100 gr de azúcar moreno
• 200 ml de agua

*Moldes o vasitos para rellenar con la gelatina

El primer paso es hidratar las láminas de gelatina en un plato con agua fría hasta que estén blandas.

Por otro lado, calienta la nata en un cazo amplio y mézclala con el azúcar glacé. Cuando comience a hervir, retira la preparación del fuego.

Escurre la gelatina y mézclala con la nata.

Ralla la piel de dos limones y resérvala.

Prepara el zumo de limón, cuélalo y añádelo a la nata. Remueve la preparación hasta que se mezcle bien.

A continuación, rellena los moldes con la gelatina y mételos en el congelador hasta que solidifique.

Cómo confitar la ralladura de limón:

Para confitar la ralladura de limón, pon el agua con el azúcar moreno al fuego y, cuando comience a hervir, añade la ralladura de limón que tenías reservada.

Deja que se haga, a fuego lento, durante 5 minutos, escurre la ralladura y reserva el almíbar sobrante en un cuenco para utilizar de inmediato.

Para servir tu postre, basta con sacar la gelatina de limón y nata de los moldes y acompañarla con un poco de almíbar y ralladura confitada de limón.

¡Esperamos que disfrutes de este postre de verano!