Leche frita, un dulce muy cremoso

La leche frita es un postre tradicional que suele prepararse en casa y que resulta buenísimo acompañado de café o servidos con un vino dulce.

Descubre los aromas que se impregnan en este dulce durante su elaboración.

Los deliciosos bocados en los que se presenta la leche frita deben su textura cremosa a que, en la receta, es básico utilizar leche pasteurizada y entera.

En la elaboración de leche frita para 4 ó 6 personas, necesitas:

• Medio litro de leche entera
• 120 gr de azúcar blanco
• Media vaina de vainilla
• La piel de un limón
• 25 gr de fécula de maíz (maicena)
• 25 gr de harina

Para rebozar

• 2 huevos
• 150 gr de harina

Para espolvorear

• 150 gr de azúcar glacé
• Canela

Comienza poniendo a hervir en un cazo 350 ml de leche, el azúcar blanco, la piel de limón y la vaina de vainilla abierta y rascada.

Por otro lado, en un recipiente amplio, comienza a batir el resto de la leche con la maicena y la harina.

Incorpora la leche hervida al recipiente amplio y, sin dejar de remover, ponla de nuevo al fuego.

Deja que la leche se haga durante unos minutos, hasta que espese.

A continuación, retira la piel del limón y la vaina de vainilla, y echa la masa sobre una bandeja impregnada de mantequilla reservándola hasta que enfríe.

Cuando esté lista, corta porciones de la masa con ayuda de un molde y rebózalas con la harina y el huevo batido.

Fríe cada unidad en una sartén amplia con un fondo de aceite a fuego alto.

Escurre tu leche frita colocándolas encima de un plato con papel absorbente. Y, por último, espolvoréalas con azúcar glacé y canela.

Si acompañas la leche frita con un café macchiatto, será el postre perfecto.