Aunque a esta receta le hemos puesto el nombre de Flan de queso al limón con frutos rojos, realmente no es un flan, ya que no lleva huevo y se cuaja con gelatina.
Hemos conservado la forma de un flan, pero podríamos llamarlo también Semifrío de queso.

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Además de servirse frío, el limón y los frutos rojos le aportan un sabor ligero y refrescante.
Tardarás unos 30 minutos en prepararlo, aunque el postre necesita de 3 a 4 horas de reposo en el frigorífico para que cuaje. En su elaboración para 4 personas, necesitas:

  •  300 g de queso fresco para untar
  • 5 hojas de gelatina neutra
  • 300 ml de leche
  • 2 cucharadas glandes de Azucarera Blanco
  • zumo de ½ limón

 
Para la salsa:

  • 1 cajita de arándanos frescos
  • 1 cucharada de agua
  • 2-3 cucharadas grandes de Azucarera Blanco
  • 1 cucharadita de piel rallada de limón

 
Lo primero que vamos a hacer es introducir la gelatina en un bol con agua fría y dejar que se ablande durante 5 minutos.
Vertemos el queso en otro cuenco, añadimos 2 cucharadas de azúcar blanco y batimos con unas varillas hasta que resulte cremoso. Si queremos un mayor sabor a limón, podemos añadir ralladura de piel de limón.
Poco a poco vamos incorporando la leche, de manera que queden bien mezclados. También pueden usarse unas varillas eléctricas.
Escurrimos la gelatina y la derretimos con el zumo de medio limón en un cazo a fuego bajo o en el microondas. Vertemos rápidamente a la mezcla de queso y leche y removemos.
Echamos la preparación en flaneras individuales o en una grande e introducimos en el frigorífico, dejando cuajar entre 3 y 4 horas. Cuanto más grande sea el molde más tiempo necesitará.
 
Para preparar la salsa, lavamos los arándanos, los introducirlos en un cazo con el azúcar blanco (2 o 3 cucharadas, según prefieras una salsa más cítrica o dulce) y una cucharada de agua. Cocemos a fuego suave durante 4-5 minutos removiendo. Retiramos y dejamos enfriar.
 
Para desmoldar la preparación, sumergimos parcialmente las flaneras en un cuenco con agua caliente evitando que el agua penetre en el interior, les damos la vuelta sobre un plato y agitamos un poco de forma suave para que caiga. Si al desmoldar el flan no cae a la primera, volver a sumergir el molde en el agua caliente unos instantes.
 
Al servir el postre, acompañamos los flanes con la salsa de arándanos y alguna frambuesa fresca si queremos.
 

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